Sin dudas la liberación del joven Arlan Fick fue un regalo de navidad ya que arrancó una sonrisa a toda la población Paraguaya sin saber de la vida, los gustos, las acciones de este muchacho que estuvo 267días en cautiverio. Nadie lo conocía realmente pero una desgracia del destino lo convirtió en una causa común, poco después de su Arlan Fick en compañía de su padre tuvo que cumplir con un último pedido del Ejército del Pueblo Paraguayo el cuál fue entregar canastas navideñas a pobladores de Nueva Fortuna en la localidad de Curusu de Hierro. La familia Fick no conocía a ninguno de estos ciudadanos pero de igual manera puedo apostar que hubo un sentido de satisfacción al entregar estos obsequios y arrancar una sonrisa a cada poblador humilde que sin dudas ahorraron unos guaraníes que para ellos es más que oro en estos días festivos.
Así como el pueblo Paraguayo no conocía a Arlan y su familia pero con su liberación nos trajo un cachito de felicidad, así como el joven no conocía a los pobladores a quienes entregó las canastas pero estas fueron receptoras del agradecimiento por el obsequio. Ahora les digo a ustedes, no necesitamos de un secuestro, no necesitamos de publicidad en los medios, no necesitamos conocer a quienes podemos hacer el bien. A todos aquellos que tienen un poco más de los demás a que en estas fiestas llevemos algún obsequio a aquellos que lo necesitan y no se fijen en saber quienes son, sólo sientan la satisfacción de haber llevado de forma simbólica UNA CANASTA DE FELICIDAD
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domingo, 28 de diciembre de 2014
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UNA CANASTA DE FELICIDAD por @ElíasCamus
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