El Obispo Ricardo Valenzuela realizó una amplia reflexión durante la homilía en la misa central de Caacupé, las críticas fueron dirigidas a las autoridades corruptas, la ciudadanía cansada y los abusos de menores por parte de miembros de la iglesia.
Este sábado se desarrolló la misa central en la Basílica de Caacupé y el Obispo Ricardo Valenzuela expuso su homilía ante la atenta mirada del Presidente de la República, Mario Abdo Benítez y varias autoridades, además de los miles de fieles que asistieron a la explanada. Valenzuela en su reflexión habló sobre la crisis y la corrupción en el gobierno y la administración de la justicia, "Nos lastima y preocupa la acentuada gravedad de la crisis de la moral pública y privada, de la vida política y de la administración judicial, de la situación de injusticia social y económica de la población. La actuación de varias autoridades y dirigentes políticos, al no tener programas bien pensados y de un comportamiento no adecuado a su investidura, está creando malestar y descontento de grandes sectores de nuestra patria. Esto nos lleva a decir: ¡Basta ya a la desvergonzada corrupción e impunidad a la que se ha llegado!" mencionó.
Se dirigió a la justicia calificándolo como sometido a los deseos de políticos," Miremos a la Casa de la Justicia. Ya no podemos permanecer impasibles ante tanta corrupción. Se ha perdido la confianza en la Justicia porque se ha perdido el respeto. La ley no es igual para todos. Es sabido que los políticos tienen sometidos a los jueces y fiscales mediante organismos manejados por ellos mismos. Estamos al borde de la justicia por mano propia. Porque "sus hijos no siguieron su camino: fueron atraídos por el lucro, aceptaron regalos y torcieron el derecho"" enfatizó.
El malestar ciudadano hacia autoridades de dudoso desempeño fue otro punto expuesto, "Hay un claro malestar de la ciudadanía hacia varios de nuestros representantes, porque se han alejado de los temas centrales de la sociedad y además llevan sobre sus espaldas serios cuestionamientos, cómo son el tráfico de influencias, las protecciones mutuas, los privilegios, salarios altos, mecanismos de presión, etc. ¡El país está cansado! El pueblo está cansado de esta clase de autoridades. Cansado de las injusticias... cansado por la falta de oportunidad a un empleo digno... cansado de la violencia y la inseguridad reinante en las calles... cansado de los egoístas que buscan sólo su bienestar individual... cansado de los insaciables de dinero y de poder... cansado de los que abusan del poder...cansado de los que oprimen y compran conciencias ajenas... cansado de los que negocian sectorialmente los bienes del país... cansado de los que hipotecan el futuro de los niños y los jóvenes... cansado de los que pretenden enseñar a los niños y niñas ir contra su propia naturaleza... cansado de los que pretenden sustituir los valores familiares por el individualismo y libertinaje... cansados de la pornografía, los robos, la violencia, los secuestros y homicidios; del cultivo cada vez más creciente de drogas y su tráfico impune y el consumo desmedido de bebidas alcohólicas que tantas tragedias ya produjo, en fin, cansado de la corrupción generalizada que parece no tener límites. " sentenció.
Así también utilizó un momento para la autocritica por los casos de abuso de menores por parte de miembros de la iglesia, un tema sensible," En primer lugar, para nosotros los pastores, si algo nos quedó claro de todo lo vivido en el ámbito moral es que la vida de sacerdotes y religiosos no siempre corre por los cauces del Evangelio. Nos apartamos de ellos por nuestros errores y, lo que es más grave, por la comisión de delitos como los abusos de menores y otros delitos. Por ello, una vez más pedimos perdón, rogando que los delitos se denuncien ante la justicia. ¡La Iglesia no es lugar para delinquir!" recalcó.
A pesar de las duras críticas, el Presidente de la República, Mario Abdo Benítez se mostró satisfecho con la exposición de Valenzuela, el mandatario participó de la misa acompañado de su esposa, varios ministros y un fuerte contingente de seguridad.
Fuente: ABC Digital.
Este sábado se desarrolló la misa central en la Basílica de Caacupé y el Obispo Ricardo Valenzuela expuso su homilía ante la atenta mirada del Presidente de la República, Mario Abdo Benítez y varias autoridades, además de los miles de fieles que asistieron a la explanada. Valenzuela en su reflexión habló sobre la crisis y la corrupción en el gobierno y la administración de la justicia, "Nos lastima y preocupa la acentuada gravedad de la crisis de la moral pública y privada, de la vida política y de la administración judicial, de la situación de injusticia social y económica de la población. La actuación de varias autoridades y dirigentes políticos, al no tener programas bien pensados y de un comportamiento no adecuado a su investidura, está creando malestar y descontento de grandes sectores de nuestra patria. Esto nos lleva a decir: ¡Basta ya a la desvergonzada corrupción e impunidad a la que se ha llegado!" mencionó.
Se dirigió a la justicia calificándolo como sometido a los deseos de políticos," Miremos a la Casa de la Justicia. Ya no podemos permanecer impasibles ante tanta corrupción. Se ha perdido la confianza en la Justicia porque se ha perdido el respeto. La ley no es igual para todos. Es sabido que los políticos tienen sometidos a los jueces y fiscales mediante organismos manejados por ellos mismos. Estamos al borde de la justicia por mano propia. Porque "sus hijos no siguieron su camino: fueron atraídos por el lucro, aceptaron regalos y torcieron el derecho"" enfatizó.
El malestar ciudadano hacia autoridades de dudoso desempeño fue otro punto expuesto, "Hay un claro malestar de la ciudadanía hacia varios de nuestros representantes, porque se han alejado de los temas centrales de la sociedad y además llevan sobre sus espaldas serios cuestionamientos, cómo son el tráfico de influencias, las protecciones mutuas, los privilegios, salarios altos, mecanismos de presión, etc. ¡El país está cansado! El pueblo está cansado de esta clase de autoridades. Cansado de las injusticias... cansado por la falta de oportunidad a un empleo digno... cansado de la violencia y la inseguridad reinante en las calles... cansado de los egoístas que buscan sólo su bienestar individual... cansado de los insaciables de dinero y de poder... cansado de los que abusan del poder...cansado de los que oprimen y compran conciencias ajenas... cansado de los que negocian sectorialmente los bienes del país... cansado de los que hipotecan el futuro de los niños y los jóvenes... cansado de los que pretenden enseñar a los niños y niñas ir contra su propia naturaleza... cansado de los que pretenden sustituir los valores familiares por el individualismo y libertinaje... cansados de la pornografía, los robos, la violencia, los secuestros y homicidios; del cultivo cada vez más creciente de drogas y su tráfico impune y el consumo desmedido de bebidas alcohólicas que tantas tragedias ya produjo, en fin, cansado de la corrupción generalizada que parece no tener límites. " sentenció.
Así también utilizó un momento para la autocritica por los casos de abuso de menores por parte de miembros de la iglesia, un tema sensible," En primer lugar, para nosotros los pastores, si algo nos quedó claro de todo lo vivido en el ámbito moral es que la vida de sacerdotes y religiosos no siempre corre por los cauces del Evangelio. Nos apartamos de ellos por nuestros errores y, lo que es más grave, por la comisión de delitos como los abusos de menores y otros delitos. Por ello, una vez más pedimos perdón, rogando que los delitos se denuncien ante la justicia. ¡La Iglesia no es lugar para delinquir!" recalcó.
A pesar de las duras críticas, el Presidente de la República, Mario Abdo Benítez se mostró satisfecho con la exposición de Valenzuela, el mandatario participó de la misa acompañado de su esposa, varios ministros y un fuerte contingente de seguridad.
Fuente: ABC Digital.
No hay comentarios:
Publicar un comentario