DURAS CRITICAS MARCARON CARTA DEL MONSEÑOR VALENZUELA - CAMUS click

Breaking

miércoles, 8 de diciembre de 2021

DURAS CRITICAS MARCARON CARTA DEL MONSEÑOR VALENZUELA

El Monseñor Ricardo Valenzuela, obispo de Caacupé, leyó su tercera carta al pueblo paraguayo durante la homilía de la misa central de la Virgen de Caacupé. En la nota resaltan duras críticas a los corruptos, el manifiesto de la esperanza en medio de la pandemia, la situación en el norte del país, entre otras cosas.
La tercera carta dirigida al pueblo paraguayo lleva el nombre “Organizar la esperanza”, expresión tomada de la homilía del papa Francisco, como idea que hace referencia a la necesidad de aliviar el sufrimiento de los más débiles y carenciados de la comunidad.
En el escrito, el monseñor Ricardo Valenzuela manifiesta su repudio al manejo poco efectivo del gobierno al inicio de la pandemia; “Muchos de ellos pudieron haberse salvado o vivir más tiempo si la reacción gubernamental hubiese sido más acertada y no tan débil para enfrentar eficientemente el problema, tal como era de esperarse de quienes están investidos de autoridad en ese campo y a quienes las instituciones pertinentes pusieron a disposición los recursos y mecanismos necesarios para ello”, indica la carta.
Así también, mencionó que la pandemia puso a todos los seres humanos en el mismo plano, sin importar la condición social o económica; “Ricos que pudiendo comprarlo todo no encontraron forma de salvarse o de salvar a los suyos y pobres que, aun contando con todo el apoyo, tampoco pudieron salvarse ni salvar a los suyos”, dijo.
Valenzuela enfatizó en que los políticos deben dejar los privilegios a un lado, además de la riqueza malhabida, solo así se podrá avanzar y trabajar por el bien común; “¡Basta de mezquindad, basta de excesiva acumulación del dinero y de los recursos en pocas manos que tiene su contraparte en la exclusión de muchos! Recordarán todos que, al inicio de la pandemia, con el susto natural, se hicieron muchas y lindas promesas de reforma; la mayoría de ellas quedaron en el olvido”, expresó.
Catalogó la impunidad como una "epidemia nacional", además de la corrupción; “Si las instituciones pertinentes se declaran incompetentes para ello, es deber primero de los gobiernos y después de la responsabilidad ciudadana encontrar la manera de extirpar este mal”, plantea como cura a la corrupción.
La nota también apunta a las licitaciones amañadas en medio de la pandemia; “La pandemia se llevó gran parte de la deuda contraída en nombre de la salud pública y luego de algunos tejes y manejes solo gozan de buena salud quienes se alzaron con casi todas las licitaciones y compras sobrefacturadas de emergencia para supuestamente responder con eficiencia a los rigores del COVID”, señala.
En su momento, se dirigió a las nuevas autoridades municipales, manifestando que están expectantes como la ciudadanía, de los primeros pasos de las nuevas autoridades municipales, elegidas en votaciones libres el 10 de octubre pasado; “Señores intendentes y concejales electos, a la hora de hacer sus nuevas tareas tengan presente su compromiso con la fe, con el pueblo y con sus familias. Ellos tuvieron el derecho y la libertad de elegirlos, pero también tienen el derecho de sentirse orgullosos de ustedes, de la decisión que tomaron al elegirlos. No los defrauden, no renuncien a poner aunque sea un granito de arena para construir el cambio en el país. Acuérdense que están para servir a sus comunidades y municipios!”, puntualiza.
En la carta se lanza contra el auge de violencia en el país. “Hoy por hoy, la violencia adquiere otras formas, como la que implementan los forajidos del Norte, secuestrando, asesinando a personas inocentes, y extorsionando a las instituciones al punto de mantenerlas maniatadas, sin mucho margen de respuestas legales”, indica.
Recordó así a las familias de Óscar Denis, Félix Urbieta y Edelio Morínigo, secuestrados y sin noticias ciertas para sus atormentados allegados.
Estas líneas y muchos otros aspectos fueron escuchados atentamente por autoridades que asistieron a la homilía en Caacupé.

No hay comentarios:

Publicar un comentario